En 2018, se creó la Oficina Municipal de la Energía con la ayuda del Ayuntamiento de Monachil y la cooperativa Cooperase con el objetivo de asegurar el ahorro energético, la eficiencia y el autoconsumo de energías renovables. En 2019, un Real Decreto permitió el autoconsumo colectivo. En 2020, Cooperase y la asociación Pasos solicitaron una subvención del SOM Energía y 57 germinadores sociales, lo que impulsó la participación social y permitió la constitución de la Comunidad Energética Río Monachil en 2022. Hoy, cuenta con 55 miembros.

La Comunidad de Viviendas Energéticas «Przylesie» (CEH «Przylesie») se creó en 1968, mientras que en 1972 se puso en funcionamiento el último edificio multifamiliar. La urbanización, gestionada inicialmente por la Cooperativa de Viviendas para Profesores, se separó de ella y empezó a funcionar de forma independiente en 1990. Ahora funciona al amparo de la ley de cooperativas. La HEC ha realizado inversiones para la modernización térmica de los edificios, se han instalado paneles fotovoltaicos en los tejados y se han construido nuevos balcones donde podrán instalarse dichos paneles en el futuro.

Dos comunidades de jardinería urbana, Tartu Eco Gardening community y Emajõe Gardening community, llevan funcionando desde 2019 para producir, proporcionar y compartir alimentos ecológicos locales, como ejemplos de permacultura. Su objetivo es aumentar la biodiversidad urbana e introducir posibilidades de jardinería urbana para las personas. Han sido creados y son mantenidos por organizaciones sin ánimo de lucro, mientras que una asociación establecida con el gobierno local ha permitido tener acceso a terrenos con un alquiler a largo plazo.

El REC Nápoles EST Solidario se fundó en 2021 en San Giovanni a Teduccio, un barrio del área metropolitana de Nápoles. La creación del REC fue el resultado del esfuerzo conjunto de Legambiente, el mayor movimiento ecologista de Italia, y dos fundaciones: una financiera ética que financió los proyectos (Fundación Sur) y otra eclesiástica que catalizó la participación de los ciudadanos (Famiglia di Maria). El compromiso en el proceso de construcción de REC de los hogares locales duró de 2018 a 2020. En 2023, REC cuenta con 40 hogares que experimentan condiciones de alta privación y pobreza energética. Más de 100 personas se están beneficiando de REC tanto directamente en términos de reducción de la factura energética como indirectamente por un enorme aumento de su alfabetización energética que permite un cambio en el uso y consumo de energía.

La Red de « Fabricantes» surgió espontáneamente al principio de Covid-19, cuando escaseaban los respiradores en los hospitales. Una red de personas con conocimientos informáticos se unió para desarrollar e «imprimir» respiradores utilizando impresoras 3D, y continuaron hasta que terminó la escasez de respiradores. Sin un liderazgo específico o evidente, se organizó una reacción rápida y eficaz ante una emergencia de salud pública utilizando los recursos tecnológicos disponibles y los conocimientos de los participantes, y se obtuvieron resultados gracias a la cooperación eficaz (en línea) entre los participantes.

En el invierno de 2017-2018, la región finlandesa de Kainuu sufrió apagones generalizados. Como consecuencia de la nieve en las copas, muchos árboles cayeron sobre los tendidos eléctricos, dejando sin electricidad durante varios días a unos 11.000 hogares del este de Finlandia (Carelia del Norte y Kainuu). Los apagones también afectaron a las empresas, la agricultura y los proveedores de servicios públicos de estas regiones. El activismo local de autoayuda se movilizó justo después y mejoró la preparación de la zona para situaciones similares.

En 2009, tras el terremoto de L'Aquila (Abruzos, centro de Italia), se formaron en la ciudad numerosos comités de diversa índole. Pocos comités siguen activos hoy en día, entre los cuales la experiencia más estable es la de 3.32. Junto con otras asociaciones, 3.32 creó una zona verde autogestionada por los ciudadanos, donde las personas sin hogar podían dormir y recibir asistencia. Esta zona, denominada Casematte, sigue existiendo y presta ayuda social y organiza actividades culturales para la ciudad.

Durante la inundación de Génova (Liguria, noroeste de Italia), la gente se movilizó personalmente para ayudar a la población y limpiar las calles anegadas. En Val Bisagno surgió una sinergia operativa espontánea entre el presidente del distrito local de la ciudad y grupos de personas que intervinieron como voluntarios. Entre ellos había muchos grupos de activistas sociales de centros sociales. La intervención social autoorganizada se centró primero en la autoayuda y la seguridad de las personas y luego evolucionó hacia la actividad de limpieza de casas y calles inundadas. En los días siguientes también se incluyó asistencia psicológica, distribución de material de primeros auxilios y alimentos. En años posteriores, redes similares, a menudo animadas por los mismos grupos e individuos, se activaron para responder a la emergencia socioeconómica provocada por la pandemia de Covid-19 en 2020.

Desde mayo de 2022, con el Vienna Climate Team, la ciudad de Viena ha adoptado un nuevo enfoque cooperativo en materia de presupuestos participativos: los residentes pueden contribuir directamente con sus ideas sobre cómo abordar la crisis climática en sus distritos. Estas ideas se desarrollan después con la administración y los responsables políticos, donde todos los participantes pueden trabajar juntos y aprender unos de otros. La decisión final sobre la aprobación de ideas o proyectos corresponde a los jurados ciudadanos. En 2022, el Vienna Climate Team contó con un presupuesto de 6 millones de euros. Tras unos 40 días de acción, los residentes de tres distritos piloto presentaron 1.100 ideas en seis campos de acción diferentes. En 2023, el Vienna Climate Team se amplió a tres nuevos distritos.

El Grupo Climático Joven nació del proyecto AEED en 2019 y tenía como objetivo aumentar la participación de los jóvenes en las políticas climáticas locales. Uno de los pilotos fue en el Municipio de Granollers (España), y el Ayuntamiento junto con Ecoserveis promovieron y mantuvieron un Grupo Climático Juvenil en la ciudad para probar el proceso participativo. El proyecto finalizó en 2021, pero el ayuntamiento ha continuado la colaboración con algunos de los jóvenes en el marco de otro proyecto sobre narrativas de vulnerabilidad climática local.

Desde 2012, el municipio de Li (Ostrobotnia del Norte, Finlandia), que cuenta con unos 10000 habitantes, colabora con ciudadanos, empresas y asociaciones locales en la búsqueda de soluciones para combatir el cambio climático. Sus objetivos y acciones relacionados con la neutralidad en carbono del municipio, la economía circular y los recursos naturales están incluidos en la «Hoja de ruta para un Li respetuoso con los recursos» y en el presupuesto municipal. Dentro del municipio, el programa InnoHiili - Servicios innovadores con bajas emisiones de carbono» ha incluido a grupos muy diversos de personas en el proceso de planificación. Su objetivo es encontrar nuevas soluciones que se adapten a la vida cotidiana de los residentes, reducir las emisiones de dióxido de carbono causadas por el transporte diario y apoyar la participación de los residentes en la planificación de sus propios servicios.

La calidad del aire es el factor peor valorado de la calidad de vida en Cracovia y desencadenó importantes protestas antes del proceso de prohibición de la quema de combustibles sólidos, que entró en vigor en Cracovia el 1 de septiembre de 2019. En 2020 se introdujeron Zonas de Tráfico Limitado en el distrito de Kazimierz. En mayo de 2022 se celebraron consultas públicas con residentes y empresas sobre el proyecto de Zona de Transporte Limpio (ZTL), durante las cuales se presentaron más de 600 comentarios y preguntas. Más de 100 personas participaron directamente en el proceso y, por sorteo, se obtuvieron las aportaciones de 45 residentes.

Una zona antes no urbanizada, alrededor de un antiguo aeropuerto militar justo al borde de la ciudad de Tartu, ha experimentado importantes transformaciones, pasando de funciones militares-industriales a zonas verdes de recreo, que ahora ofrecen una amplia variedad de oportunidades e infraestructuras recreativas orientadas a reverdecer la zona. Se han llevado a cabo diferentes actividades participativas organizadas por el gobierno local, como reuniones con los residentes y las partes interesadas para planificar toda la zona, concursos de ideas, concurso de arquitectura para construir una casa comunitaria y un centro educativo, y actividades de plantación junto con los residentes.

Bajo el liderazgo del Canciller Federal socialdemócrata Kreisky, a principios de la década de 1970 se empezó a hablar cada vez más de la energía nuclear en Austria, y la crisis energética de 1975 volvió a señalarla. Para preparar la puesta en marcha de una central nuclear en construcción en el municipio de Zwentendorf, el gobierno anunció una campaña de información. El anuncio y la puesta en marcha de esta campaña dieron lugar a la alianza a escala nacional de grupos antinucleares para formar la Iniciativa de los Opositores Austriacos a la Energía Nuclear. Las protestas comenzaron a principios de los años setenta y se intensificaron a partir de 1975. Mientras que la primera resistencia corrió a cargo principalmente de círculos conservadores y grupos tradicionales de protección de la naturaleza y el medio ambiente, en 1975 el movimiento se transformó en un movimiento que abarcaba toda Austria y se centró en Viena y las capitales de provincia. En el momento álgido de sus actividades, el movimiento contaba con 500.000 personas. A pesar de las considerables diferencias políticas entre los opositores a la energía nuclear, se consiguió una postura unificada y organizada frente a las autoridades políticas. Como último recurso al políticamente controvertido proyecto, en 1978 se celebró un referéndum vinculante, que se saldó por un estrecho margen a favor de los opositores a la energía nuclear.

Granada: En el distrito Norte de Granada, las movilizaciones comenzaron durante la crisis económica de la década de 2010 y continuaron durante la pandemia de Covid-19 como consecuencia de los cortes de electricidad contínuos provocados por el mal estado de las instalaciones eléctricas y los enganches ilegales. El movimiento vecinal sigue activo en la actualidad, está formado por más de 100 personas y cuenta con el apoyo de una serie de ONG.
Alianza contra la Pobreza Energética: La EPA comenzó en Barcelona en 2014 con la redacción (a través de un proceso participativo que involucró a varios actores regionales) de un proyecto de ley para proporcionar más garantías sobre los derechos energéticos frente a los cortes, más mecanismos para proteger a los ciudadanos vulnerables, etc. Con el tiempo, se ha extendido a toda la región de Cataluña, y hoy en día va viento en popa, ganando importancia en la agenda pública como representación de la vulnerabilidad de los ciudadanos en el mercado energético. Cuenta con cientos de participantes regulares, principalmente familias en situación de vulnerabilidad de diversos orígenes étnicos, con el liderazgo de una ONG que proporciona orientación y asesoramiento jurídico. La EPA consiguió reunir el número de firmas necesario para obligar al Parlamento catalán a debatir una propuesta de ley y obtuvo el respaldo de la mayoría de los partidos. La ley fue finalmente aprobada, y está en vigor desde octubre de 2014 siendo la ley más puntera en España en la actualidad para la salvaguarda de los hogares desfavorecidos y de los derechos energéticos.

La asociación Pro Hanhikivi se creó como reacción al plan de construcción de una nueva central nuclear en el municipio finlandés de Pyhäjoki. La acción cívica comenzó en otoño de 2007 y finalizó en 2020. En 2014, la asociación contaba con más de 300 miembros, y en 2015 la vicepresidenta de la asociación, Hanna Halmeenpää, fue elegida diputada y ocupó el cargo hasta 2019. La asociación trabajó principalmente en los despachos, en los procesos de consulta del proyecto, en los tribunales y a través de los medios de comunicación, pero casi nunca mediante manifestaciones. En 2022, el proyecto de central nuclear se vino abajo debido a algunos retrasos y a la pérdida de apoyo político tras la invasión rusa de Ucrania.

El smog ha sido un tema crucial en la historia de Cracovia durante 200 años. No fue hasta el siglo XXI cuando empezó a calar en la conciencia pública. En Cracovia influyeron dos factores: (1) el anuncio de 20 años de investigación en la Universidad Jagellónica del impacto negativo en el embarazo y el desarrollo infantil de la contaminación del aire en Cracovia, y (2) en diciembre de 2012, tres personas crearon un perfil de Facebook «Alerta Cracovia Smog» (KAS), publicando indicaciones diarias de las concentraciones de partículas en la ciudad. Se formó espontáneamente una comunidad en torno al perfil de Facebook, que empezó a amplificar el descontento público y a presionar a las autoridades locales. Las primeras marchas de protesta atrajeron a unas 300 personas, y al cabo de un tiempo alcanzaron el tamaño de varios miles de manifestantes. Al mismo tiempo, se inició una campaña social a gran escala en los medios de comunicación y mediante publicidad exterior, que fue financiada desde la base por la comunidad asociada en torno al Tesoro Nacional. Gracias a las actividades de la KAS, desde 2019 ya no se puede quemar carbón ni madera en toda la ciudad. La organización allanó el camino también para todas las resoluciones contra el smog en Polonia (desde entonces se han creado más de 50 alertas locales contra el smog).